La lactancia materna es la forma más natural y efectiva de alimentar a los bebés, proporcionando todos los nutrientes necesarios y fortaleciendo el vínculo entre madre e hijo.
La OMS y la UNICEF recomiendan que las y los bebés sean alimentados única y exclusivamente con leche materna hasta los 6 meses de edad, sin usar formulas lácteas o algún otro sucedáneo de leche materna.